Iglesia de San Miguel

La actual Iglesia de San Miguel es un templo gótico de una sola nave con capillas laterales realizado en el s. XVI, levantado sobre los restos de un templo románico anterior. De la iglesia original lo único que conservamos es la torre románica (datada en el último cuarto del s. XII), de planta cuadrada, y compuesta por un total de 5 pisos, de los cuales sólo son originales los tres primeros. El segundo piso arquitectónicamente está muy relacionado con el románico aragonés, y en él encontramos una pareja de arcos murales de medio punto. En el tercer cuerpo se ha incorporado en cada cara un bello ventanal geminado de dos arquivoltas que apean sobre dos columnas, decoradas con motivos vegetales y personajes con atuendos moriscos. El cuerpo superior está rematado por una terraza almenada.

Fue una de las seis parroquias construidas en la Villa tras la Reconquista y Repoblación, y siempre tuvo especial relevancia porque en su atrio original (que no es el que se conserva en la actualidad) se reunían, a toque de campana tañida, los “Concejos Abiertos”.

El presbiterio y el Retablo Mayor fueron costeados por el doctor García Hernández de Carrascón, cuyo sepulcro de alabastro policromado se halla en la parte izquierda del altar. El Retablo Mayor, dedicado al Arcángel San Miguel, es una obra destacada del Renacimiento español, un magnífico retablo plateresco realizado en el s. XVI por Pedro de Aponte (pintor manierista que trabajó en la Corte de Fernando el Católico).

En el lado de la Epístola encontramos tres capillas: la más cercana a los pies del templo está dedicada a la Virgen del Pilar, la segunda a la Virgen de las Flores, y la tercera a los Santos Emeterio y Celedonio. Por otro lado, en el lado del Evangelio tenemos una capilla dedicada a Santa Ana, y la base de la torre.